Permite que tu hij@ llore

Existe una tendencia general a rechazar las emociones desagradables en nuestros hijos. Cuando vemos a nuestro hijo llorar y le decimos “No llores. No pasa nada. No tienes que llorar por eso…” El llanto puede ser la expresión de emociones como la tristeza, la frustración, el miedo… Aunque nos duela su experiencia, inhibirlas no será lo más beneficioso para ellos. Que no las exprese, no significa que no las sienta.

Las emociones, también las experimentadas como desagradables forman parte de la vida y tienen una función adaptativa.  Aceptarlas, reconocerlas y  permitir su expresión, será el primer paso para gestionarlas de una forma adecuada y que cumplan su función adaptativa, promoviendo una buena salud mental en nuestros hijos.

Por eso acepta las emociones desagradables como algo natural, inherente al ser humano y permite su expresión libremente.

Pero, si observas un incremento en la frecuencia e intensidad de estas emociones, que persiste en el tiempo, que además es concurrente con cambios en su alimentación y/o su  patrón de sueño, u otros ámbitos, es recomendable su valoración.

Psicóloga Carmen Martín / Tel.: 916334774 / info@psicologa-carmenmartin.es