Víctima del pasado VS Dueño del presente
Cuando nuestros relatos del pasado justifican un sufrimiento, traemos a este momento emociones que corresponden al pasado. Por ejemplo empiezas a recordar aquello que te hizo/dijo/ocurrió y te enfadas/entristeces… como si esto estuviera ocurriendo ahora.
Nuestro relato nos sitúa en una posición de víctima, ya que no podremos volver al pasado para cambiarlo y no te queda otra opción que sufrir por ello.
Aunque aquella situación acabó, sigues perpetuándola en el tiempo, perpetuando también el sufrimiento.
De esta forma el paso del tiempo, no curará la herida, porque sin darte cuenta la mantienes abierta.
Para salir de esta cadena perpetua de sufrimiento, ya habrás deducido que en primer lugar habremos de situar el acontecimiento en su espacio, y su tiempo. Después vuelve a la situación actual, al día de hoy, y pregúntate. ¿Qué me desagrada hoy? ¿Cuáles son mis deseos, que es lo que quiero en mi vida?¿Que puedo hacer yo para cambiarlo?
Si a esta última pregunta la respuesta es “no sé, nada, es el otro el que puede cambiarlo”, el siguiente proceso será aceptar responsabilidad, que te permitirá encontrar otras respuestas a esta pregunta. Pero este proceso este merece una publicación solo para él.
De momento, si vas ubicando cada acontecimiento en su tiempo y espacio, consigues iniciar el proceso.
Psicóloga Carmen Martín / Tel.: 916334774 / info@psicologa-carmenmartin.es