Una nueva vida con un conocido compañero, el dolor crónico.

Dolor crónico. psicologa- camenmartin.es I-numanzaaEl dolor crónico se define, en términos generales, cuando este se prolonga más de 6 meses y no se alivia con tratamientos médicos ni quirúrgicos.

Cuando cualquiera de nosotros sentimos dolor, hacemos lo posible por acabar con él, en esta lucha aparece la tensión. Pero si a pesar de nuestros esfuerzos y los tratamientos médicos no conseguimos aliviar el dolor, llega la sensación de impotencia, la irritabilidad, la ira y con el paso del tiempo esta situación tiene repercusiones psicológicas como un estado de ánimo depresivo,  ansiedad…

El dolor crónico llega a producir grandes cambios en la vida de las personas. Muchas tienen que abandonar su trabajo, sus aficiones, sus actividades cotidianas… Todo esto suele tener consecuencias también en las relaciones con los demás, la dificultad de mantener ciertas rutinas y la incomprensión por parte de otros que también se añaden a lo anterior.

Después de esta breve explicación, cualquiera puede comprender que no se trata solo de dolor, sino que es algo más complejo, la unión de múltiples factores que interactúan entre sí, y aumentan la complejidad de la situación.

Podemos hacer algunas cosas, que nos ayuden a disminuir la intensidad de la percepción del dolor.

Se hace fundamental es la aceptación del dolor, como algo que está aquí ahora y estará en los próximos días.

Desde que apareció el dolor, muy probablemente tu vida está condicionada por él y tus comportamientos centrados en evitarlo. Y a medida que pasa el tiempo se hace más intensa la sensación de impotencia, la indefensión, la frustración… no es fácil admitir que a día de hoy y en un futuro a corto plazo el dolor no desaparecerá, pero es la realidad, y como es vamos a enfrentarla.

A pesar de tus esfuerzos no consigues evitarlo, y tu vida, sin darte cuenta está centrada en el dolor, cualquier comportamiento o pensamiento gira entorno a él.  Esto casi de forma inevitable nos lleva a centrar también nuestra atención en él, ayudando a que la percepción de la intensidad del dolor se incremente.

El dolor cambió tu vida, pero quizá ha llegado el momento de orientar esos cambios y ponerlos en concordancia con nuevos deseos y objetivos, que conseguirás a pesar de sentir el dolor.

Establece otros nuevos y diferentes objetivos en tu vida, digo nuevos, no los que tenías antes de que apareciera. Te llevará a nuevos comportamientos que desplacen a aquellos que se centraban en el dolor. No significa esto que dejes de lado ni tratamientos médicos, ni las otras opciones que tengas entre manos para quitarlo. Sigue con este objetivo pero añade otros nuevos.

Analiza la forma en que interpretas tus problemas. Si crees que el origen de todos tus problemas es el dolor, y el dolor no desaparece, no podrás resolverlos. Por tanto, define de nuevo los diferentes problemas y dificultades con los que te encuentras y analiza la forma de resolverlos sabiendo que la sensación de dolor te acompañará, pero que no impedirá que consigas tus nuevos objetivos.

Aprende alguna técnica de relajación, yoga, meditación,  para mantener alejada en lo posible la tensión que lo acompaña.

Aprende a  manejar las dificultades en tus relaciones con los demás.

Además incluye el ejercicio físico en tus rutinas.

Si eres capaz de realizar estos cambios, descubrirás el comienzo de una nueva vida con un conocido compañero.

Como explique al inicio es una situación compleja, de forma que su abordaje también lo es.  Por esto es importante trabajarla en su complejidad y teniendo en cuenta las diferencias individuales.  De forma que si no te sientes capaz de hacer estos cambios sol@. Solicita ayuda a psicólogo que te guíe, acompañe y te enseñe como superar las dificultades.

El apoyo psicológico no elimina el dolor, pero te ayuda a llevar una nueva vida con menos sufrimiento.

Psicóloga Carmen Martín / Tel.: 916334774 / info@psicologa-carmenmartin.es

 

Deja un comentario

A %d blogueros les gusta esto: