Recupera el control sobre tu vida.
Si tienes sensación de falta de control sobre tus problemas, o incluso sobre toda tu vida, piensas en términos de culpables.
La culpa suele acompañar a los trastornos del estado de ánimo y unas de sus consecuencias es la indefensión.
Has encontrado al culpable de tu problema, estas enfadad@. Te encuentras haciendo un despliegue de hostilidad para que esta situación cambie. Luchando para ser escuchad@, para ser atendid@, esperand@, indefens@, frustrad@…Ves cómo pasa el tiempo y es siempre lo mismo, te sientes agotad@…
La culpa es una de las primeras barreras que nos podemos poner a la hora de resolver un problema o dificultad. Si has encontrado un culpable, has dejado las posibilidades de resolverlo están únicamente en sus manos.
Ciertamente es complejo cambiar el locus control, ya que, hay múltiples factores individuales en interacción implicados con los que trabajar. Pero ser consciente del efecto directo de encontrar culpables, de la relación causa-efecto, es el primer paso para promover cambios, dejar atrás la ira, recuperar la confianza y tomar el control.